martes, 29 de enero de 2013

Impresos Periodísticos de 1866

Ponemos a disposición de nuestros lectores estos importantes impresos del año 1866 publicados en los principales diarios de la ciudad:



CRÓNICA DE LA CAPITAL

            Compañía de Bomberos de Lima.- Con fecha de ayer, el señor Alcalde Municipal, a nombre del H. Cuerpo que preside, ha dirigido una circular a muchas personas notables de esta capital invitándolas a una reunión en el Cabildo para el día de hoy; con el laudable y patriótico fin de formar una Compañía de bomberos peruana y cuyo personal fuese compuesto por los jóvenes más decentes y acomodados.
            La reunión indicada tuvo hoy lugar, habiendo concurrido la mayor parte de las personas invitadas; en ella se celebró una acta en la cual se comprometen los firmantes a contribuir con sus esfuerzos a la extinción del fuego que en el Callao puede desarrollarse a consecuencia del próximo y probable bombardeo que del valor de los incendiarios se espera.
            La conducta del cuerpo Municipal, y la de los patriotas jóvenes que se apresuran a secundarlo, es digna de mayor elogio. Ella representa a Lima haciendo por sus esfuerzos nulo el daño que los de la Mancha quieran hacernos en el Callao.
            El Gobierno por su parte ha puesto a disposición de los nuevos bomberos dos excelentes bombas con todos sus útiles. Es muy probable que concluida la actual cuestión, dicha Compañía quede con el carácter de permanente.
            Las personas que a pesar de haber recibido esquela no han concurrido a la sesión de hoy, y a los demás que quieran ingresar en tan digna corporación, les avisamos que la acta se encuentra en la Secretaría Municipal a donde pueden pasar a suscribirla. Por los periódicos se anunciará el día de la próxima sesión.
            He aquí los nombres de algunos de los señores que han suscrito el acta de hoy: - Pablo de Vivero. – Pío J. Echenique, - M. Magán y Santiago.- J.L. Bernales, - Federico Sotomayor.- Juan P. Carpena. – José Herse. – Nicolás E. Mayorga. – J.V. de Vivero. – Isaac Arróspide. – Lorenzo Sotomayor. – Teodoro V. de Velazco. – Ricardo M. Espiell. – Enrique Ramos. – Andrés Guerrero. – N. de la Colina. – Fabio Castañeda. – Carlos O. de Zevallos. – Francisco Lazo. – Cipriano Correa. – Manuel Seminario y Váscones. – Augusto Althaus. – Felipe Pomar. – Emilio A. del Solar. – Germán Tejeda.
            Deseamos a los señores que forman tan patriótica asociación buena suerte en su grande empresa y esperamos que le den cima con la mayor prontitud posible.

“EL NACIONAL” 21 de Abril de 1866.

CUERPO DE BOMBEROS. – La Honorable Municipalidad conociendo el peligro que amenaza al Callao en un probable bombardeo y conociendo la necesidad de organizar nuevas Compañías de Bombas para evitar un incendio que podría abrazar toda la población, invitó a algunos señores para una reunión que tuvo lugar hoy, en el local de dicha Corporación con el objeto de tratar sobre la organización de dos Compañías de Bomberos. Agradecemos a nuestra laboriosa Municipalidad tan feliz iniciativa y confiamos en que el patriotismo de la juventud, no permitirá que quede sin realización un proyecto de tanta importancia en las actuales circunstancias. El Gobierno por su parte ha regalado dos bombas. Tenemos pues ya todos los elementos necesarios para organizar debidamente los cuerpos de bombas cuyos benéficos resultados se han patentizado en Valparaiso. Sólo falta que la juventud compelte la obra para que ha sido invitada por la Honorable Municipalidad y así lo esperamos, pues en la reunión de hoy han firmado ya el acta de compromiso los señores siguientes:
            Pablo Vivero (Alcalde) – Magán y Santiago – Pío Echenique – José L. Bernales – Federico Sotomayor – Carlos Pidival – Juan Carpena – José Herce – Nicolás E. Mayorga – J.P. vivero – Isaac Arróspide – Ignacio Lecca – Lorenzo Sotomayor – Teodoro V. de Velazco – Ricardo Ortiz de Zevallos – M.A. Guerrero – Carlos Alcorta – Andrés Guerrero – Enrique Ramos – Narciso de la Colina – Flavio Castañeda – Carlos Ortiz de Zevallos – Francisco Lazo.


EL COMERCIO.- Jueves 26 de Abril de 1866.
CRÓNICA DE LA CAPITAL
            Obsequio.- La casa francesa de “Chesse Wattercamps” de esta capital, ha obsequiado a la  Compañía de Bomberos “Limeña” siete piezas de cinta bicolor, para que sirva de distintivo a los miembros que componen la Compañía de Bomberos citada.

EL COMERCIO.- Jueves 26 de Abril de 1866
CRÓNICA DE LA CAPITAL
            Compañía de bomberos.- Anoche se reunión en la Municipalidad la Compañía de Bomberos y eligió a las personas que debían desempeñar los cargos de capitanes y tenientes de las acciones en que queda dividida. Aún no hemos podido obtener la lista del personal de cada Compañía; la publicaremos inmediatamente que esté en nuestro poder.
            Esta mañana salió la Compañía de Bomberos a ejercitarse en las plazuelas de la Recoleta y del a Penitenciaria; los bomberos trabajaron con entusiasmo y en nuestro concepto, llenarán debidamente la misión que se han impuesto cuando llegue la hora suprema, que no está muy lejana.
            La conducta de la Municipalidad es digna de todo elogio; con asombrosa actividad ha organizado en pocos días una brillante Compañía de Bomberos, que prestará eficaces auxilios en el incendio del Callao.

EL NACIONAL.- Jueves 26 de Abril de 1866.
CRÓNICA LOCAL
            Más sobre Bombas.- Anoche se verificó en la Municipalidad una numerosa reunión con el objeto de establecer dos Compañías de Bomberos: así sucedió en efecto. De una de ellas se ha hecho cargo parte de la juventud escogida y la otra se destinó a los artesanos de la capital.  
            Muchos de los oficiales que sirvieron en la administración pasada, han solicitado del señor Alcalde Municipal que les conceda una bomba para dirigirse al Callao, donde deben prestar sus servicios.

EL NACIONAL.- Jueves 26 de Abril de 1866.
CRÓNICA LOCAL
            Ejercicios de bomberos.- Según lo dispuesto en la sesión que tuvo lugar anoche en el salón de la Municipalidad, se reunió a las siete de la mañana el cuerpo de bomberos en San Agustín, con el objeto de sacar la bomba que está depositada allí, para hacer el primer ejercicio.
            A las siete en punto se puso en marcha hacia la plazuela de la Recoleta, donde bajo la dirección de un cabo de bomberos, tuvo lugar el primer ensayo que, no obstante las malas cualidades de la bomba, se practicó con toda la celeridad y destreza que puede exigirse a quienes, por primera vez, manejan semejante aparato.
            Después de haber llegado a esa plazuela se dirigió a las de la Penitenciaría y allí con más independencia del cabo director, se practicó el segundo ensayo, que no fue tan bueno como el primero; debido a la mucha corriente que traía el agua de la acequia donde se colocó el chorizo, (término técnico) o sea el tuvo aspirante. Hecho este segundo ensayo se llevó la bomba al local de San Agustín y se citó a los bomberos para otra reunión que debe tener lugar a las 3 de la tarde en dicho local.
            A las cuatro se hizo otro ejercicio en la plazuela de la Recolecta y se citó a todos los miembros de la Compañía para una reunión que tendrá lugar en el local de San Agustín a las siete de la mañana en punto.


EL BIEN PÚBLICO
Lima, Abril 28 de 1866
CRONICA LOCAL
            Compañía de Bomberos.- Están ya elegidos los que han de servir los cargos de Capitanes y Tenientes de las diferentes secciones.
            La Compañía está haciendo ejercicio para adiestrarse en el manejo de las bombas.

EL COMERCIO.- Sábado 28 de Abril de 1866
CRÓNICA DE LA CAPITAL
            Obsequio.- Los señores Dibos hermanos han obsequiado a la compañía nacional de bomberos, una pieza de franela roja a propósito para las camisas de trabajo.
            Por nosotros y a nombre de los jóvenes bomberos damos las gracias a los predichos señores.


EL COMERCIO.- Sábado 5 de Mayo de 1866.
CRÓNICA DE LA CAPITAL
PERDIDA SENSIBLE.- Con profundo sentimiento ponemos en conocimiento de nuestros lectores, que el valiente joven D. Antonio Alarco recibió la muerte en la Torre de la Merced, el día del combate con los piratas españoles. El joven Alarco que pertenecía a la compañía de bomberos de la Municipalidad, no pudo moderar su patriótico entusiasmo y queriendo compartir la gloria con sus hermanos, marchó presuroso al lugar del combate. El funesto acontecimiento que privó de la vida al Coronel Gálvez y a otros esclarecidos ciudadanos, ocasionó también la pérdida del joven Alarco.
            La memoria de las víctimas del dos de Mayo será imperecedera y avivará constantemente el odio a la España y a sus sicarios.
            Los compañeros del señor D. Antonio Alarco, han levantado una suscripción para elevar en el panteón un monumento dedicado a su memoria.

“EL COMERCIO”.- LIMA, MIÉRCOLES 8 DE MAYO DE 1866
ASUNTOS PERSONALES
ANTONIO ALARCO
            Si el guerrero vuela entusiasta al combate, es en pos de gloria y en fuerza del deber, pues allí encuentra una tumba gloriosa, o bien la conquista de un hecho más, que le sirva para enriquecer la plana de sus servicios y de un espléndido galardón; mas el paisano, tan solo es guiado por el fuerte impulso del amor patrio, y pelea denodado sin recompensa alguna; si fracasa, su nombre, muchas veces pasa desapercibido; y si triunfa, toda su recompensa es la grata satisfacción de haber servido a su patria: el primero dejó asegurado el porvenir de su familia, el segundo, nada!! Miseria y lágrimas!! Cuán heroico y loable es pues, el sacrificio de un ciudadano que, arrastrado por ese fuego santo, es víctima de la feroz y envenenada metralla del enemigo! Cuán grande y sublime es su abnegación! El señor D. Antonio Alarco ha sido uno de estos heroicos ciudadanos: al grito solemne de su querida patria, vuela entusiasta, se inscribe en la compañía de bomberos de Lima, organizada por la Honorable Municipalidad, presta todos sus esfuerzos, tanto pecuniarios como materiales, se empeña con grande esmero en la colocación de la pieza rayada de a cuatrocientas, llevada a cabo por el infatigable pueblo y patriótica juventud limeña, en el arsenal del Callao, y tan luego como se hubo regocijado en ella, ya a ofrecer sus últimos alientos a una de las otras baterías, donde muere gloriosamente, lleno de vida y despreciando un bello y lisonjero porvenir. Sublime ejemplo para la posteridad.
            Antonio Alarco ha muerto de 24 a 25 años de edad, joven aún, y de muchas y fundadas esperanzas para el país; cuantos le han conocido, le lloran con amargura y se lamentan de una pérdida que jamás lo podrán recuperar.
            ¡Oh valiente y entusiasta ciudadano, cuán gloriosa muerte has tenido! La juventud viste el crespón fúnebre del dolor: la patria te bendice, la historia te inmortaliza y la posteridad te citará como modelo de patriotismo y abnegación.

Mayo 7 de 1866.
JUAN LORENZO ESPINOSA

“EL COMERCIO”.- Miércoles 9 de Mayo de 1866.
CRÓNICA DE LA PITAL
            Bomberos de la Municipalidad.- De orden del señor Capitán se cita a todos los individuos de la Compañía para las once y media del día de mañana, en la estación del tren; con el uniforme respectivo y se espera la puntual asistencia.

“EL COMERCIO”.- Sábado 12 de Mayo de 1866.
CRÓNICA DE LA CAPITAL.
            Bomberos de Lima.- La Compañía de Bomberos de la Municipalidad marchó ayer a Bellavista con el objeto de hacer ejercicios. Cumplido éste propósito, los entusiastas jóvenes que la componen se dirigieron al Arsenal a saludar a S. E. el Jefe Supremo por la espléndida victoria alcanzada sobre nuestros jactanciosos enemigos. S.E. salió a recibir a esa escogida juventud y en breves y elocuentes palabras habló del triunfo y dio las gracias a los bomberos por su patriótica conducta en los momentos del conflicto, palabras que fueron contestadas con un viva general al Perú y al coronel Prado.

“EL COMERCIO”.- Martes 15 de Mayo de 1866
CRÓNICA DE LA CAPITAL
            Bomberos.- La Compañía de Bomberos de la Municipalidad visitó el día 13 a los señores ministros de Bolivia y del Ecuador. El señor Benavente no estaba en su casa. El señor Malo recibió a los bomberos con cortesía y amabilidad y al contestar al señor Espiell que habló a nombre de la Compañía, manifestó sus ardientes simpatías y el inmenso placer que tenía por el triunfo del Callao. Sentimos no poder insertar las bellas palabras del señor Malo.

“EL COMERCIO”.- Miércoles 16 de Mayo de 1866.
CRÓNICA DE LA CAPITAL
            Bomberos de la Municipalidad.- El capitán de esta Compañía convoca a los señores que la formas, para que concurran al Cabildo, el viernes 18 del presente a las 9 ½ de la mañana, con el uniforme respectivo; a fin de asistir al oficio fúnebre que por el difunto compañero D. Antonio Alarco, se celebra dicho día, en el templo de Nuestra Señora de las Mercedes. 

“EL COMERCIO”.- Viernes 18 de Mayo de 1866
CRÓNICA DE LA CAPITAL
            Don Antonio Alarco.- Hoy han tenido lugar en el templo de Nuestra Señora de las Mercedes, los honores fúnebres consagrados a la memoria de este malogrado joven, cuyo patriótico entusiasmo lo arrastró a buscar una muerte gloriosa en el memorable combate del 2 de Mayo.
            Asistieron a esta fúnebre ceremonia, un crecidísimo número de personas notables, los bomberos de la Municipalidad, a cuyo grupo perteneció el valiente y recomendable joven Alarco, y los oficiales de la Compañía de Bomberos franceses, todos con sus respectivos uniformes.
            Concluida la misa, el señor D. Ricardo Espiell, leyó en el atrio del templo un discurso en honor del finado.

lunes, 7 de enero de 2013

Manuel J. Cuadros

Fueron sus padres Manuel Asencio Cuadros y doña Rosa Viñas, habiendo nacido en la ciudad de Lima el 7 de diciembre de 1848.   Como hijo único cursó estudios en el seminario de Santo Toribio.  Con diez y ocho años de edad fue fundador de la Compañía  de Bomberos “Municipal Lima”  - que mas adelante tomaría el nombre de Lima – el 21 de abril de 1866 , fundada a fin de prestar auxilio en el próximo bombardeo de la flota española del Almirante Méndez Núñez . 

Así de bombero participó en el combate del Callao del 2 de mayo, obteniendo todos los títulos que el gobierno otorgó a todos los participantes en aquella justa.   Pasados los años y habiendo regresado de Europa en donde cursó estudios de ingeniería,  en 1877 contrajo matrimonio con doña Maria Pflucker.   Declarado Chile la guerra al Perú el 5 de abril de 1879 Cuadros cedió al gobierno el islote Patillos  que poseía en Iquique para que sea fortificado.   En los primeros meses de la guerra formó parte de la Guardia urbana de Chorrillos    labor que dejó para asumir una invitación que le había hecho Piérola  para dar forma a un proyecto secreto que se venía dando forma dentro de la armada y que consistía en idear proyectiles a fin de volar unidades navales chilenas. 

 Este plan no era otra cosa que la formación de una brigada de torpedistas.   Creemos que estas labores comenzaron en el mes de marzo sino en a comienzos del mes de abril de 1880 en vista de que el 24 de abril de aquel año en la fecha que la historia recuerda como el día que muriera Pedro Ruiz Gallo en el Callao, murió también el alférez de fragata Manuel Gil Cárdenas en Ancón en momentos que operaban un bote torpedo con mecanismo ideado precisamente por Manuel Cuadros.   Aquella brigada además de contar con la valiosa experiencia de Cuadros la componían el capitán de fragata Leopoldo Sánchez Calderón y los alféreces de fragata Decio Oyague, Carlos Bondy entre otros colaboradores que conforme pasaban los días se integraban al grupo.   Todos ellos serían los encargados de ejecutar las operaciones contra los buques chilenos dando uso a los proyectiles ideados por Manuel Cuadros.  Por otro lado espías e infiltrados chilenos habían tomado noticia de la existencia de este grupo secreto y habían dado parte a sus superiores al respecto quienes incluso sabían de la existencia del ingeniero Cuadros:

“ ….. Los servicios de inteligencia alertaron a sus jefes de información acerca de que se venía preparando en Lima una serie de atentados con artefactos explosivos confeccionados por el ingeniero Manuel Cuadros Viñas secundados por oficiales de la armada del Perú , destinados a ocasionar baja en unidades chilenas …..”



Crucero  Loa


A pesar de lo sucedido en Ancón que conllevó a la muerte de Gil Cárdenas el capitán Sánchez le reitero su confianza a Cuadros quien a más tardar en junio tuvo otro proyectil listo.  El artefacto fue inmediatamente trasladado al norte cerca de la hacienda Infantas por Cuadros, Leopoldo Sánchez, Carlos Bondy  entre otros.  Aquel lugar fue escogido para dar inicio a la operación , que consistía en poner el torpedo en un bote repleto de víveres y cuya carga se activaría luego de retirarse unos sacos de alimentos. 

Debido a que el lugar por naturaleza geográfica se tornaba hostil y hacia peligrar la misión, se decidió por escoger otro más cercano al Callao.  Así el 2 de julio el torpedo fue puesto en otra lancha y llevado al mar:  
          
“ ….. Después de revisar algunos tropiezos imprevistos, procedía a cargar el aparato efectuándose dicha operación al costado de la barca Adelaida Rojas cuyos tripulantes y armamento fueron previamente transbordados a un pontón, para ponerlos a cubierto, caso de un siniestro;  con el mismo fin ordené se mantuvieran distantes las embarcaciones que contenían el cargamento, pues el mal estado de la dinamita hacía peligrosísima la operación;  felizmente a las 6 horas pm.  Todo quedó enteramente terminado y entregué la balandra completamente lista a las personas designadas….”

Así fue y a pesar que el comando naval chileno estaba advertido que los peruanos tramaban una serie de atentados, los jefes de las naves chilenas en el Callao al parecer no le dieron la debida importancia y seriedad al asunto:

“….. Número 783.-  Comandancia en jefe de la Escuadra.  Callao Junio 22 de 1880. El Comandante General de Armas de Iquique con fecha 4 del presente mes, me dice:  Su excelencia el Presidente de la República en telegrama de ayer me dice para U. S. Lo que sigue: En la primera oportunidad comunique a Riveros lo siguiente:  En una carta de Lima se dice lo siguiente: En Ancón el joven Manuel Cuadros preparando un segundo torpedo a pesar de haber tenido un fin desgraciado el primero. He oído decir que el torpedo es de esta manera:  Se compone de una lancha de vela cargada con comestibles i carneros, i al quitar el último bulto, hay un resorte para reventar el torpedo. Lo que transcribo a U.S.  para su conocimiento y demás fines… Y yo a U. S. para que tome las medidas del caso. Dios  Guarde a Usted. Galvarino Riveros.”

Aquella desidia fue su gran error. Como preámbulo a lo que vendría, mas adelante, un acto premonitorio si podemos llamarlo así ocurrió en el combate de lanchas librado el 25 de mayo 1880 entre nuestra lancha Independencia y las chilenas Janequeo y Guacolda-  esta acción fue considerada como el primer ataque hostigamiento de las fuerzas peruanas en tierra hacia los buques de la escuadra bloqueadora, como lo afirma el historiador Rómulo Rubatto- como antecedente importante, ya que en el crepúsculo del 3 de julio de 1880 era hundido en la bahía del Callao el transporte chileno Loa, que formaba parte de la escuadra chilena que bloqueaba ese puerto.  El artífice de la operación: El alférez Carlos Bondy  quien había usado la balandra que contenía los explosivos creados por Manuel Cuadros.

“ …. La balandra fue llevada al mar, de tal forma que dio a los tripulantes de la nave enemiga la idea que se trataba de una embarcación que quería eludir el control para su carga de contrabando.  Los chilenos a bordo del Loa mordieron el anzuelo…..”

En  el parte de la operación que elevara el comandante Sánchez., testigo del hecho junto a Cuadros, quienes estaban en la torre vigías del arsenal del Callao dice:

“….. El éxito mas feliz coronado la perseverancia y los esfuerzos de cerca de tres meses, el señor Cuadros, a quien algunos miraban con recelo desde el siniestro de Ancón, había obtenido un triunfo con su invento, y me es grato consignar en este oficio que la confianza que SE ha tenido en el éxito desde que conoció el aparato ha contribuido en mucho a la realización del acontecimiento de ayer….”

La Covadonga

Pasados los días el grupo de valerosos peruanos no bajaron la guardia, querían más presas.  Por su parte los chilenos no salían de su asombro y a pesar de lo ocurrido con el Loa la oficialidad naval chilena seguía confiada, dejando de lado nuevamente la seguridad, ya que la  posibilidad de que un nuevo ataque, pensaron, por parte de los peruanos jamás ocurriría.  Nuevamente se equivocaron.  Aquí citemos el comentario que al respecto tiene el historiador naval ,Capitán de Fragata A.P. Francisco Yabar :

“….. Hay que recalcar que el servicio de inteligencia de Chile funcionó a la perfección debiendo ser su fuente de información del más alto nivel pues estas operaciones las conocían muy pocas personas. Pero, pese a que la alerta se pasó con la debida anticipación, el comandante del “Loa” , Juan Guillermo Peña, incumplió la orden y tomó infeliz decisión de apoderarse de la lancha junto con su apetitoso cargamento, sin imaginarse lo que sucedería…”

Opinión muy cierta de lo que sucedió y una causa principal del hundimiento del buque: la ambición de su comandante. Mientras tanto Cuadros seguía trabajando en perfeccionar los mecanismos de un nuevo torpedo    - como lo afirma el capitán Yabar  en su obra – y el comandante Sánchez y los demás brigadistas en la manera de lograr un nuevo efecto sorpresa, ya que la carnada no podía ser la misma:

“…. El operativo que concluyó con el feliz hundimiento del Loa y las ingentes pérdidas que ocasionó al enemigo, fue un incentivo para el ingeniero Manuel Cuadros, que inmediatamente empezó a fabricar otro artefacto similar con diferente mecanismo de percusión; esta vez, la definición del objetivo y ejecución táctica del operativo, estaría bajo la responsabilidad del teniente don Decio Oyague Neyra….”
Como dijimos anteriormente los chilenos confiados bajaron la guardia y pensaron en mínima la posibilidad de un nuevo atentado. Nuevamente se equivocaron. El 13 de setiembre de 1880 en el puerto de Chancay  era echada a pique la goleta Covadonga de 600 toneladas con otro bote señuelo ejecutado por el teniente Decio Oyague Neyra.  Esta nave que era el orgullo de la marina chilena, además de ser llamada la “vencedora” ( ¿? )  de la fragata blindada Independencia del Perú, al fin pagaba sus delitos:  El acribillar a balazos a los náufragos de Punta Gruesa, el bombardear puertos indefensos, entre otros crímenes.

Que mejor regalo para el enemigo que fue hundida el día que celebraban su aniversario patrio.

“ ….. Lo que se puso en la goleta fue un artístico escudo peruano, muy bien tallado, que indudablemente podía ser todo un botín de guerra. Y así fue. Sin embargo los chilenos antes de apoderarse de la nave ordenaron una inspección minuciosa de la goleta. Revisaron hasta los remos.  No dejaron sin observar minuciosamente. Y solo cuando creyeron estar seguros que no había peligro alguno, izaron la embarcación. Y en ese momento una explosión sacudió el escenario. La Covadonga se fue a pique y perecieron 81 de sus hombres….”

Según comentarios de la época el capitán de Ferrari hizo caso omiso a las ordenes de destruir todo objeto extraño cerca de los buques, lo que fue aseverado por su segundo jefe el teniente Enrique Gutiérrez, quien trató de revisar la  pequeña embarcación, pero fue impedido por el propio de Ferrari, quien se dejó llevar por la ambición.   El mismo error que cometió el jefe del Loa volvió a repetirse con el de la Covadonga. Como vemos el grupo liderado por Sánchez Calderón cumplió sus objetivos, dando un buen provecho a los proyectiles ideados por el ingeniero Cuadros. Reconociendo en la persona de Manuel Cuadros como el autor y ejecutor de aquellas acciones, el gobierno de Piérola  lo condecoró con la Cruz del Mérito Militar.

“ …. Mi buen amigo: entre los actos oficiales de carácter reservado de mi gobierno, existe un supremo decreto dictatorial acordando a usted la cruz del mérito militar de primera clase y reconociéndole para más holgada situación el correspondiente premio pecuniario como autor único y ejecutor principal que es usted de la destrucción completa de las naves de guerra enemigas Loa y Covadonga….”

Perdidas las batallas de San Juan y Miraflores y ocupada Lima por los chilenos, Manuel Cuadros tuvo que buscar refugio para el y su familia en el interior del país debido a que el enemigo había puesto precio a su cabeza ya que los servicios de inteligencia chilenos como citamos al principio, lo habían identificado aun antes de los atentados del Loa y Covadonga.

“…..Vino a sumarse el periodo de obligado ostracismo originado por la valiosa oferta que el vencedor hiciera por la cabeza de mi esposo “vivo o muerto” y que originó una dolorosa peregrinación sostenida a costa de mil sacrificios pecuniarios….”

Terminada la guerra, el gobierno le encomendó dirigirse a Europa a fin de adquirir armamento. Antes había desconectado un artefacto explosivo dejado por los chilenos en la Casa de la Moneda evitando así una catástrofe.   Diez años después de los sucesos del Callao y Chancay, hubo un encuentro de opiniones entre algunos personajes, entre los que estaban Carlos Paz Soldán y Carlos Bondy , este último incluso en declaración a la prensa y en una entrevista que le hiciera el primero de los nombrados, habló que si bien es cierto los proyectiles fueron ideados por Cuadros, él nada tuvo que ver y mucho menos debió tener reconocimiento alguno.  Aquella polémicas declaraciones crearon un clima de hostilidad hacia el honor de Manuel Cuadros quien dicho sea de paso no se encontraba en el país, pero fue defendido notablemente por sus familiares y amigos íntimos.

Posteriormente nuestro personaje se desempeñó como síndico de la Municipalidad de Lima, además fue diputado al congreso por Lima, senador electo por Piura y administrador de la aduana del Callao. Así también fue alcalde de Chorrillos, ciudad en la que tuvo la gran y difícil tarea de reconstruirla desde sus cenizas y dotarla de agua potable.  En 1896 fue Ministro de Fomento y el 16 de mayo del mismo año de Guerra y Marina.  Así  este hombre extraordinario de espíritu de servicio y de nervios bien templados como lo califica el historiador Manuel Zanutelli Rosas, falleció en Lima el 21 de setiembre de 1898, causando gran consternación la pérdida de este patriota en la ciudad, que agradecida honró su memoria poniéndole su nombre a una de sus calles.