Johan Frederick Lembcke Lorentzen fue un distinguido ciudadano alemán nacido el 2 de marzo de 1809 en Hamburgo dedicado al comercio desde joven y que en la madurez de su vida decide apartarse de sus padres y el terruño y embarcarse como negociante y buscar nuevos horizontes primero en China y debido al destino virar con rumbo hacia América del Sur. Es precisamente ese afán de aventura que aceptó una oportunidad para ir al Perú 1832 renunciando no con mucha pena a su destino en Asia. Apenas desembarcado en el Callao y pisando por primera vez tierra peruana el 15 de mayo de 1833 decidió cambiar sus nombres de pila y adaptarlos al españól de estas tierras por lo que se le conocería apartir de ello como Juan Federico Lembcke Lorentzen.
Establecido en Lima de inmediato se hizo de la colocación ventajosa por cuatro años en la respetable Casa Inglesa de los señores Templemann Bergman, contrato que le había sido propuesto poco antes de embarcarse el 15 de diciembre de 1832 en el Buque "Princesa Luisa" de la Real Sociedad de Comercio en Berlín y que cuyo intinerario era América del Sur, las Islas Sandwich y de allí directo a la China.
Aunque se sabe que apenas termináse su contrato en la casa inglesa, de inmediato renovaría su intención de embarcarse con rumbo a Cantón en China, esto no sucedió debido a la satisfacción de ésta empresa por los servicios prestados, deseando el señor Bergmann contar con los servicios de Lembcke ya no como empleado sino, como asociado. Aceptando muy agradecido por tamaña oferta, fue al término de su contrato el 31 de octubre de 1836 que ingresó como socio industrial a la referida casa inglesa por cuatro años.
Terminado su contrato el 31 de octubre de 1840 y no habiéndose prolongado el mismo, concluida su liquidación, Federico Lembcke se estableció bajo su propio nombre estableciendo el 1ero de enero de 1841 la casa Juan Federico Lembcke y Cia (J.F. Lembcke y Cía.) primera firma alemana establecida en la ciudad de Lima.
En el tema personal, contrajo nupcias el 29 de octubre de 1836 con la dama peruana Isabel Fabiana Bellodas y Salas matrimonio del cual tuvieron 16 hijos. Doña Isabel era hija del médico Luis Bellodas quien en 1824 atendiera de sus heridas al General Rodil amotinado en el Real Felipe en el Callao y la dama Manuela de Salas y Estrada nieta del sabio don José Perfecto de Salas, asesor General del Virrey Amat y Juniet.
Como hombre de negocios y sabiendo la importancia de la exportación de los muy famosos productos de origen Chino, estos monopolizados por una empresa francesa y otra inglesa, decide incursionar en ello trayendo desde la China un cargamento de artículos que causaron sensación en la ciudad trayendo consigo un alto nivel de ganancias y utilidades para la empresa. Estos éxitos con el correr de los años le valieron además ganar para su casa el nombramiento de Agente Comercial y representante de el Germanseher Lloy en Berlín en 1869 y en 1877 de la Compañía Hamburguesa de Vapores.
En 1845 y junto a Federico Pfeiffer ambos representantes de asuntos diplomáticos de la embajada de Alemania Lembcke interviene en defensa de los ciudadanos alemanes traidos desde Clausthal/ Harz para trabajar en en la hacienda Morococha. Estos compatriotas suyos estaban amotinados en virtud y protesta de una serie de maltratos generados por los hacendados.
En el tema personal, contrajo nupcias el 29 de octubre de 1836 con la dama peruana Isabel Fabiana Bellodas y Salas matrimonio del cual tuvieron 16 hijos. Doña Isabel era hija del médico Luis Bellodas quien en 1824 atendiera de sus heridas al General Rodil amotinado en el Real Felipe en el Callao y la dama Manuela de Salas y Estrada nieta del sabio don José Perfecto de Salas, asesor General del Virrey Amat y Juniet.
Como hombre de negocios y sabiendo la importancia de la exportación de los muy famosos productos de origen Chino, estos monopolizados por una empresa francesa y otra inglesa, decide incursionar en ello trayendo desde la China un cargamento de artículos que causaron sensación en la ciudad trayendo consigo un alto nivel de ganancias y utilidades para la empresa. Estos éxitos con el correr de los años le valieron además ganar para su casa el nombramiento de Agente Comercial y representante de el Germanseher Lloy en Berlín en 1869 y en 1877 de la Compañía Hamburguesa de Vapores.
En 1845 y junto a Federico Pfeiffer ambos representantes de asuntos diplomáticos de la embajada de Alemania Lembcke interviene en defensa de los ciudadanos alemanes traidos desde Clausthal/ Harz para trabajar en en la hacienda Morococha. Estos compatriotas suyos estaban amotinados en virtud y protesta de una serie de maltratos generados por los hacendados.
Disfrutando del respeto, la admiración y el aprecio en la sociedad limeña es que 1871 asume la comandancia accidental de la Compañía Nacional de Bomberos Lima Nº 1 ante la licencia solicitada por el titular comandante Juan Francisco Andraca motivo por el cual, fue él, el encargado de elaborar la memoria del referido ejercicio y en la que en clara manifestación de responsabilidad y amor institucional refiere:
"....Antes de pasar adelante, permitidme que os pida dispensa por las faltas que en el desempeño de éste cargo, haya podido cometer, pero también os protesto, que el buen servicio que la prosperidad y adelanto de la compañía, han sido y seran siempre, los únicos móviles de mis procedimentos como bombero sea cual fuese el puesto que en ella ocupe...."
Al año siguiente fue elegido Comandante de la Bomba Lima y es precisamente ese año 1872 que también desempeñó el cargo de Comandante General del Directorio de Bomberos y Salvadores de Lima. Antes luego de su ingreso a la Lima en 1869 se había desempeñado como teniente de sección (1870) y Capitán Segundo Jefe (1871).
Firma del Comandante Federico Lembcke
Archivo Histórico de la Bomba Lima
Retirado por voluntad propia de la Bomba Lima junto a otros socios de la misma, funda la Compañía Salvadora Lima Guardia de Propiedad en Incendios el 1ero de enero de 1874. Posteriormente y retirado del servicio funda con ex miembros de la Lima y la Salvadora Lima la Compañía Cosmopolita Guardia de Propiedad en Incendios el 14 de Agosto de 1877.
Ambas instituciones con el correr de los años fueron reconocidas ya no como compañías de salvadores y guardia de propiedades en incendios sino, como Compañía de Bomberos Salvadora Lima Nº 5 - con el número 10 a partir de 1976 - y Compañía de Bomberos Cosmopolita Nº 6 - con el número 11 en el mismo año que la anterior. En la actualidad y junto a la Lima realizan una importante labor en favor de la ciudad, la primera ubicada en la calle Belén del centro histórico de Lima y la segunda en el distrito de San Borja.
Lembcke fue co fundador del Banco de Lima en 1869 siendo nombrado ese mismo año, gerente vitalicio. En el ámbito diplomático fué Consul del Reino Unido Suecia y Noruega en Lima desde 1853 y en 1854 fue nombrado Miembro Honorario del Instituto de Africanos del Perú. En 1858 fue elevado a la categoría de Consul General Vitalicio en el Perú y en 1867 el Rey Gustavo Adolfo II de Suecia le confirió el grado de Caballero de la Orden Real de Vassa la mas alta e importante distinción que otorgaba esa nación. En 1871 ocupó interinamente el cargo de Consul General de Dinamarca por ausencia del titular señor Henry Witt y a solicitud del Zar Alejandro III ocupó el Consulado General de Rusia.
Fue miembro del Club La Unión en Lima y fundador de la Compañía de Seguros Lima. Producto de su matrimonio como ya dijimos anteriormente tuvo 16 hijos, dos de los cuales Carlos Oscar y Enrique murieron durante la Guerra del Pacífico; el primero en la campaña del sur (1880) y el segundo en la batalla de Miraflores del 15 de enero de 1881. Este último se dice que apenas casado, partiió al frente de batalla en defensa de la Patria dejando desconsolada y viuda a su joven esposa, la misma que le lloró por muchos años y que por causa de tamaña tragedia perdió la razón.
Ambos hermanos se encuentran enterrados en la Cripta de los Héroes del Cementerio Presbítero Matías Maestro y en Miraflores y San Isidro hay calles que llevan el nombre de Enrique.
Enrique Lembcke fallecido en la Batalla de Miraflores
Archivo Courret
Archivo Courret
Entre otras actividades, se sabe que Federico Lembcke, estuvo involucrado en la industria de la extracción de azucar y fue uno de los empresarios que defendió la industria nacional de ese entonces, motivo por el cual no dejó de tener confrontaciones memorables con los miembros de la familia Gildemeister por el trato inhumano que le daban a sus obreros. Se sabe además que Lembcke, jamás hizo negocio alguno con el estado ni tuvo participación alguna en el tema del guano y el salitre, todo lo adquirió producto de sus dotes innatos como empresario y negociante.
Eso si, fue comisionado por el gobierno en innumerables oportunidades una de las cuales es la encargada de liquidar el antiguo Banco de la Providencia fundado por don Julían de Zaracóndegui el cual quebró en 1866. Dicha labor le valió una mención honrosa en la memoria leida al Congreso de la República por el entonces Ministro de Hacienda don Manuel Pardo y Lavalle.
Eso si, fue comisionado por el gobierno en innumerables oportunidades una de las cuales es la encargada de liquidar el antiguo Banco de la Providencia fundado por don Julían de Zaracóndegui el cual quebró en 1866. Dicha labor le valió una mención honrosa en la memoria leida al Congreso de la República por el entonces Ministro de Hacienda don Manuel Pardo y Lavalle.
Federico Lembcke falleció en Lima el 25 de diciembre de 1886 siendo sepultado en el cementerio Británico del Callao.
Nota a parte es importante recalcar que la redacción real del apellido es Lembcke y no Lembecke como erroneamente se encuentra en libros, artículos y demás, como por ejemplo en el letrero mal escrito de la calle de Miraflores que homenajea a "Enrique Lembecke" cuando deberia decir realmente "Enrique Lembcke".
Información proporcionada por su tataranieta Jessica Chávez Lembcke de Bruns radicada en Alemania y su bisnieta Sra Maritza Lembcke de Lima Perú.
Federico Gonzáles Orbegoso Los Lembcke, Diario El Comercio, 22 de abril de 1979, pp 11 y 12
Federico Gonzáles Orbegoso Los Lembcke, Diario El Comercio, 22 de abril de 1979, pp 11 y 12
